Qué hacer ante la sospecha de una Hernia Inguinal
1) Obtenga rápidamente un diagnóstico formal.
Puede que no sienta dolor, pero cuanto antes sepa su médico que la padece, mejor. Es posible que le hagan una ecografía para confirmar el diagnóstico.
2) Conozca los riesgos de una hernia estrangulada.
En un pequeño número de casos (3%), una hernia puede estrangularse. Se trata de una urgencia médica que requiere atención inmediata. Los síntomas de una hernia estrangulada incluyen dolor agudo o intenso, vómitos, sangre en los excrementos, estreñimiento, malestar con o sin fiebre y sensación de quemazón alrededor de la hernia.
3) Consiga una fecha para la operación.
Al menos en el Reino Unido, los médicos de cabecera deben remitir "a todos los pacientes con una hernia inguinal manifiesta o sospechada a un proveedor quirúrgico", según la Guía de Comisionamiento del Real Colegio de Cirujanos de 2013. Si le deniegan una cita para operarse de una hernia, puede considerar la cirugía privada. Cuanto antes busque atención quirúrgica, mejor.
4) La experiencia de su cirujano en la cirugía de hernia inguinal puede ser un factor crucial.
Según un informe del grupo Hernia Outcomes, la experiencia quirúrgica afecta las tasas de recurrencia y dolor postoperatorio. Considere la experiencia de su cirujano antes de la operación.
5) Considere cambios en su estilo de vida antes de la cirugía.
Perder peso, dejar de fumar y aumentar la fibra en su dieta son recomendaciones importantes. Practique yoga, pilates y otras formas de ejercicio abdominal suave. Utilice nuestros calzoncillos para hernias para retener suavemente la hernia en el abdomen y evitar que se expanda. Cuanto más pequeña sea la hernia, mejor será el resultado quirúrgico.
6) Postoperatorio.
Las hernias tienden a reaparecer, ya sea en el mismo sitio o en el lado opuesto de la ingle. El NHS estima que el porcentaje de recidivas postoperatorias es del 10%. Es posible que necesite algunos cambios en su estilo de vida para reducir la probabilidad de recidiva de la hernia.
